Karma Peiró y Luís Ángel Fernández Hermana inciden en el uso que el periodismo hace del big data.
La interacción hombre-máquina provoca la chorros de datos susceptibles de ser utilizados por los ciudadanos, las organizaciones y empresas. Los periodistas y los ciudadanos empiezan a exigir la publicación de esos datos que son transcendentales para obtener información de calidad. La diferencia entre open data y big data es esencial, los datos deben ser accesibles y tratables, deben estar a disposición de organizaciones y ciudadanos, son el germen de nuevas iniciativas sociales, innovadoras, esenciales para agendas de actuación y desarrollo. Artículos relacionados:

Si atacan la privacidad, ¿qué debemos defender?

Creced y multiplicaos, les dijeron a las ristras de bytes

La ideología de los números